Bienvenido

sábado, 21 de noviembre de 2009

Hoy... no me puedo resistir

Llege a casa despues de haber almorzado fuera. Estaba relajado, así que me fui directamente a la cama, sin quitarme la ropa ni nada, me dejé caer sobre ella. Mientras intentaba quedarme dormido, no paraba de pensar en la noche de sexo que tuve con ella. Esas cosas que ella me hacia, y tanto me puse a pensar que casi inconcientemente mi miembro comenzó a tomar vida. Tumbado boca abajo, mi polla hacia presión sobre la cama, y eso me gustaba. Poco a poco fui moviendome para rozarme, mientras recordaba con todo lujo de detalles la noche anterior. Estaba muy excitado yo solo, asi que decidí masturbarme. Me levanté y me dirigí al cuarto de baño pero al pasar por el pasillo descubrí que habia una cámara de fotos... siempre habia fantaseado con la idea de hacerme algunas fotos, aunque no soy nada fotogénico. Pero me daba igual estaba excitado y la idea de fotografiarme mientras me masturbaba me excitaba aun mas. Entré al baño y comencé a hechar algunas fotos...




.... Hice unas cuantas fotos mas... algunas mas intimas, pero todavía no me atrevo a enseñar. Pensé la idea de grabar también un video. Pero por el momento, aparte la cámara de fotos a un lado y comencé a masturbarme. Mi polla ya no aguantaba mas, queria dejarse de tanto jueguecito y ahora queria acción... Allí sentado en la ducha, completamente desnudo, deje de caer el agua sobre mi, mientras mi mano agarraba fuertemente mi polla. Mis movimientos con la mano cada vez eran mas y mas rápido, tanto que en unos poco segundos comence a sentir el orgasmo. Pero mi mano no paraba de masturbarme, mientras veia como los chorros de semen caian una y otra vez sobre mi cuerpo. Hasta que llegó un momento en el que me quedé sin fuerzas, con el cuerpo temblando, casi asfixiado, solo dejando que el agua que caía sobre mi limpiara y relajara mi cuerpo.

lunes, 9 de noviembre de 2009

Animales en celo

Y de repente me llega un mensaje a mi móvil :

"Estoy muy caliente, te necesito aquí y ahora.
Te espero en mi casa"


Desde luego nuestro último encuentro en el hotel había sido algo inolvidable para ambos. Y ella por lo visto quería repetir experiencia, quizás un poco pronto para mis planes. Puesto que quería que mi sumisa estuviera mas tiempo sin mí. Lo que resulto totalmente curioso y el cual accedí a ir, fue que el encuentro se realizara en su casa. Siempre habíamos escogidos sitios que no tuvieran nada que ver en nuestro entorno, para que ninguno de los dos pudiera sentirse cohibido.
Así que cogí el coche y me dirigí a su casa. Nada mas llegar, toqué al timbre y me respondió con una voz cálida y melosa. Al abrirme la puerta de su casa llevaba puesto un camisón claro y amplio. Me quedé mirándola fijamente un rato antes de pasar. Ella se reía tímidamente y me ponía un cara como de no aguantar mas la espera.

- ¿Quieres algo de beber?- me preguntó al entrar.

- La verdad es que estoy un poco sediento.

- No me digas que estas nervioso..

No contesté simplemente dibujé una sonrisa picarona en mi cara. Fuimos a la cocina y mientras me daba un vaso de agua, me di cuenta que tenia un perro acostado en un rincón de la cocina. Era de color blanco y negro, un Mastín o un Dalmata , no se porque no entiendo mucho de perros, lo que si sé que era grande, pero se veía muy tranquilo. Me acerqué al perro, y comencé a acariciarlo. Y ella se me acercó y me acaricio la espalda:

- A ver si me voy a tener que poner celosa - dijo casi susurrándome.

Cogí al perro por su cabeza, y le desaté el collar rojo que llevaba puesto. Me incorporé, me acerqué a ella y le di un beso muy apasionado. Nuestras lenguas luchaban por entrar mas profundamente, con mi mano la apreté contra mi, levantando le un poco el camisón para poder acariciarle el culo, por encima de esas bragas de encaje que se le marcaba. Luego me separé de ella, la mire y pude ver como se reflejaba la lujuria en sus ojos.

- Ponte el collar, si quieres ser mi nueva perrita - le dije mientras le iba colocando el collar.

Le colocaba el collar , mientras sus manos buscaban la cremallera de mi pantalón, puesto mi polla comenzaba a hacer bulto. Cuando se puso el collar, cogí la correa y antes de ponérsela a su nuevo collar le dije:

- Mi perrita no debe de llevar ropa.

Así que comencé a quitarle el camisón lentamente mientras ella me miraba. Mis manos rozaban sus pechos, desabrochando su sujetador, mi lengua comenzó a jugar con su pezones, mientras que con mis manos le iba bajando poco a poco sus bragas de encaje. La agarré por la parte del culo y la levanté a pulso, sentándola sobre la mesa de la cocina. Le abrí las piernas y comencé a besar la parte interior de sus muslos. Ella comenzó a suspirar, a morderse los labios. Ella con ambas manos apoyada en la mesa se reclinó un poco hacia atras, justo cuando mi lengua encontró la entrada de su dulce néctar.


Mis dedos separaron bien su coñito para que mi boca y mi lengua jugaran un rato. Ella comenzó a gemir, estaba disfrutando.Mi lengua hacia pequeñas incursiones en su clítoris y notaba como ella daba pequeños espamos. Luego le introduje dos dedos mientra seguía comiendole el coño.


Los movimientos de su cadera iban acompañando al entrar y salir de mis dedos. Estaba muy cachonda y húmeda y yo apenas podía contener mi polla dentro del pantalón. Asi que paré, mis besos fueron subiendo desde su coño hasta su boca, para que nuestras lenguas se fundieran de nuevo en un beso apasionado. Su lengua relamia toda mi boca, queria probar su propio jugo del amor. Entonces fue cuando cogí la cadena del perro y se la até al collar. Tiré de ella bajandola de la mesa, y le dije:

- Ahora sigueme a cuatro patas, perrita.

Ella obedeció sin ningún tipo de problemas, la pasee por todo el pasillo hasta llegar a su salon. Alli mientras caminábamos, me saqué la presionada polla de mi pantalón y me senté en el sofa.




- Ahora ven aquí perrita, y lameme mi polla.

Ella vino gateando lentamente, sacando su lengua, y acomodandose entre mis piernas. Comenzó a lamerme la polla, desde los huevos hasta el glande. Luego se la introdujo de golpe. Ella comenzó a meterse la y sacársela de la boca mientras su mirada se clavaba en mi.



A todo esto no se percató de que su perro se había levantado y la había seguido por toda la casa, se quedó mirandola viendo como su dueña estaba a cuatro patas chupandome la polla. Ella continuaba dandome verdaderas succiones de placer, mientras el perro se acercaba mas y mas a ella, hasta que se quedó mirandole el culo y su coño todo húmedo. El perro comenzó a olisquear, y ella se giró rápidamente y le dijo:

- Koki fuera de aquí !!





Pero yo tiré de la cadena que llevaba puesta ella, la hize mirarme y le dije:

- Las perritas no hablan, así que deja al perro tranquilo y sigue con tu premio....

Ella de nuevo obedeció, porque su perro Koki también se habia apartado al escuchar la voz de su dueña. Ella siguió chupando, y yo estaba mas pendiente de lo que podía pasar si su perro se acercaba más. No tardo ni un minuto cuando de nuevo el perro comenzó de nuevo a olisquearle otra vez el coño, pero esta vez comenzó a darle lenguetazos en su coño. Ella intentó otra vez recriminarle al perro, pero yo la tenia cogida del collar para que no pudiera girarse. Entonces noté como ella comenzó a gemir mientras me comía la polla. Sus ojos comenzarón a entornarse y su respiración a sentirse un poco entrecortada.



La gran lengua aspera de su perro, estaba haciendo gozar a su dueña. Fue cuando inesperandamente para mi, pude ver como ella abría un poco mas las piernas para que su perro Koki siguiera lamiendo. Los lenguetazos de su perro eran muy seguidos, ella jadeaba mas y mas, hasta que el perro se abalanzó sobre ella colocando sus patas sobre su cintura. El perro comenzó a moverse rápidamente para intentar penetrarla. Ella abrió los ojos de par en par e intentó girarse de nuevo. Yo le agarre la cabeza a ella y le hizé que se introdujera mi polla hasta el fondo.

- MMMMM noooooo..... mmmmm- salió de su ahogada boca.

El perro cada vez aceleraba mas el ritmo hasta que me di cuenta que iba a penetrarla, fue entonces cuando ella, dejó de chuparme la polla para gritar de placer:

- AHhhhhhhhhhh ahhh ohhh dios !! que gorda y caliente esta !!!

La agarré de nuevo para que continuara con su mamada, yo estaba totalmente excitado de ver esa situación nueva para mi. Ella comenzó a chupar mas y mas rápido, y su perro le dabas unas embestidas brutales, tan fuertes que a veces dejaba de chuparme la polla y sus manos me agarraban las piernas mientras gritaba de placer.


Entonce ella introdujo su boca nuevamente en mi polla que estaba a punto de correrse, la introdujó entera y esta vez le agarre la cabeza para que no la sacara, mientras comencé a correrme dentro de ella. El perro estaba dando sus ultimos empujes porque esta totalmente recio. Ella con mi polla metida hasta el fondo lanzó un gran gemido de placer que hizo caer sobre mis huevos todo el semen. El perro se apartó de ella y pude ver también como una gran cantidad de corrida caía de su coño para estrellarse en el suelo. El perro jadeaba del cansancio y se lamia su polla, gorda y de color morada, mientras ella se desplomaba sobre el suelo tambien jadeando. Me puse de pie y mis gotas de semen resbalan por mi polla hasta caer en su cara.



Ella se fue levantando, me terminó de limpiar toda la polla con su lengua y luego me dijó:

- Solo espero que hayas disfrutado al menos la mitad de lo que he disfrutado yo.

domingo, 1 de noviembre de 2009

Noche de hallowen

Ya lo teníamos muy hablado, casi todo los años dejamos un día o dos a llamada "la noche libre", y habíamos decidido que fuera en Halloween. Así que esta noche teniamos libertad total el uno con el otro, saldríamos a nuestro ritmo, sin que fuéramos pareja, y podíamos hacer los que nos plazca. Era unas reglas que marcamos cuando empezamos a salir. Un de esas reglas consistia en tener una o dos noches al año de soltería, donde podriamos ligar con quien quisieramos, con la simple condición de contar todo lo sucedido al dia siguiente.

Esa misma noche comenzamos a disfrazarnos, ella iba de vampiresa con un traje negro ajustadisimo, con una raja en la parte del vestido que le llegaba hasta la cintura, dejando el hilo negro de su tanga. La verdad es que iba vestida muy provocativa, no llevaba sujetador y el escote del vestido era mas que visible. Ya antes de que salieramos por la puerta yo estaba ya bastante caliente, por el simple hecho de ver como se vestia, como se subia las medias de red hasta los muslos, como se pintaba de rojo pasión sus labios. Yo por el contrario decidí vestirme de pirata, con una camiseta blanca, semiabrochada, unos pantalones anchos y cortos de color negro, unas botas y un pañuelo rojo cubriendo mi cabeza.




A las diez de la noche llegamos a un local que tenia montada una fiesta impresionante. Nada mas entrar mi novia se dirigió hacia mi y me dijo:

- Bueno aquí nos separamos, nos vemos mañana amor.

Dandome un cálido beso mientras su mano acariciaba mi paquete por encima del pantalon. Eso me hizo ponerme muy cachondo, alli rodeado de tanta gente, ella no se cortaba. Ella se separo de mi, se dirigió hacia la barra del pub que estaba en el fondo mientras yo me quedé en la barra de la entrada. Pasaban las horas y yo seguía bebiendo y bailando. Casi todos los presentes iban disfrazados, de gata, de vampiresa, zombies... pero entre toda ellas había una chica que me habia llamado especialmente la atención, iba disfrazada asi como de bailarina árabe con un antifaz, pero tenia un collar puesto en el cuello.

Esa chica se movia bien bailando y las amigas se rozaban una y otra vez con ella. Estaba muy caliente, así que decidí probar suerte, poco a poco me fui acercando sin dejar de mirarla, como si de un lobo se acercara a su presa. Ella se fijó desde un principio, y me siguió la corriente. Al llegar a ella se separó un poco de las amigas y comenzas a bailar, su pierna entre mis piernas, la agarre de la cintura y ella se pegó un poco mas a mi. Despues de unos cuantos roces se separó riendose, y volvió con las amigas. Yo me volví, pero apenas podía moverme estaba el local aborratado de gente. Poco a poco y entre empujones me fuí hacia donde estaba mi novía y alli pude ver como estaba bailando sensualmente entre dos hombres. Ella estaba enmedio, mientras uno la besaba por el cuello, el otro la agarraba por la cintura y restregaba su polla por el culo de mi novia. Ella sonreia, cerraba los ojos y se dejaba llevar, se nota que estaba disfrutando muchisimo. Ver toda esa escena me puso demasiado caliente, así que me dirigí de nuevo hasta donde estaba la chica de antes, la bailarina. Esta vez me acerqué por detrás, para poder rodear con mi brazo su cintura. Ella miró hacia atrás y me vio de nuevo, así que comenzó a mover su culo contra mi, mientras mi otra mano la pegué totalmente a mi cuerpo bajando por mi cintura abajo. Poco a poco iba descendiendo la hasta llegar al borde de mis pantalones donde ya rozaba con su cuerpo. Mi mano buscó la falda de ella, separé un poco y metí la mano por su culo. Ella se sorprendió un poco e intentó apartarse, pero yo la agarré mas fuerte por la cintura y la pegé mas a mi , mientras le susurré al oido.

- Ey, no querrás que tu amigas se den cuenta de todo.





Ella no dijo nada, solo se dejaba hacer. Mi mano iba acariciando su cachete buscando lentamente su ropa interior, que para sorpresa mia... no llevaba. Mis dedos abrieron su culo, entre bailes y contoneos, hasta que uno de mis dedos logró llegar hasta su coño, el cual estaba empapado. Justo cuando lo toqué con el dedo, ella cogió aire, aguantó la respiración y pegó su culo mas contra mi, clavándose así mi dedo en su coñito por propia inercia. Luego soltó el aire y jadeo, su mano se dirigió hacia atrás y me rodeo la cintura. Allí entre tanta gente, con sus amigas delante, ella estaba siendo masturbada por un desconocido... yo. Ella seguía contoneandose, pero no es que bailara, era que su cintura se movia una y otra vez para que mi dedo entrara y saliera a placer. Mi polla parecia querer salir ya del pantalon, asi que le saqué la mano de su falda, ella se volteó para mirarme, yo la cogí de la cadena que llevaba en el collar y le dije al oido:

- Si quieres más, sigueme.

Comencé a caminar entre todo la gente del local, intentando ir hacia el fondo a una parte que estaba un poco mas apartado. Ella se quedó con las amigas, luego se giró y su comenzó a buscarme por toda la discoteca. Una vez que supo donde estaba yo, ella decidió seguirme como una perrita en celo. Al llegar al fondo me apoyé contra la pared,la coí por la cadena y tire hacia mi y chocó bruscamente con mi cuerpo, aunque rápidamente ella busco mis labios. Nuestras lenguas se entrecruzaron una y otra vez, su mano agarro mi espalda mientras yo la rodeaba por la cintura.


Mis labios devoraban su cuello, mientras su manos buscaban timidamente mi polla. Encontró mi cremallera, la bajó despació y colocó su mano dentro de mi pantalon.
Sus dedos apartaron mis boxer, sacó la pollo aprisionada y comenzó a masturbarme por dentro del pantalon. Habia agarrado mi polla con firmeza y con un ritmo algo acelerado, lo cual demostraba que estaba muy excitada. Mi mano tambien bajo por su barriga hacia abajo, pero fue ella misma la que despejo el camino hasta su coño, para que mi mano no tuviera ningún obstaculo. Nada mas llegar a su coño húmedo, comenzó a mover su cintura de nuevo, queria que mis dedos la follaran, y así fui como hice. Poco a poco nos ibamos fundiendo entre gemidos sordos, puesto que la música de la discoteca estaba muy alta, pero aún así notaba en su cara y en su respiración lo mucho que estaba disfrutando. Yo estaba muy cachondo ha estas altura y en cualquier momento iba a correrme, asi que me liberé de ambas manos, cogí sus manos con las mias y detuvimos todo movimento. Ella se quedo perpleja puesto que me dijo:

- ¿Porque paras ahora?... yo estaba a punto de correrme.

Yo simplemente sonreí, mis manos girarón su cuerpo, y ahora era ella quien estaba contra la pared. Comencé a besarla apasionadamente, y una de mis manos se entretuvo en sacar mi polla fuera del pantalon, atraves de la cremallera abierta. Ella miró hacia abajo y vió mi polla fuera del pantalon.


Me pegé totalemente contra ella para que pudiera sentirme, la tela de su vestido rozaba toda mi polla asi que decidi levantarle un poco el vestido. Ella se quedo fijamente mirandome, levantó su vestido por la parte frontal. Intenté colocar mi polla lo mas cerca posible de su coño. Notaba sus flujos caer sobre la punta de mi polla. Ella no se movia, sino que se retorcia de placer. Con mi mano derecha le levanté un poco su pierna, ella se inclinó un poco hacia atrás, coloque mi polla en la entrada de su coño. Cuando iba a comenzar a metersela, uno de los que habia en la discoteca me dió un pequeño empujon porque queria pasar a los lavabos de atrás, lo que me hizó que metiera mi polla de un solo golpe en su coño. Un coño tan húmedo que mi polla tan excitada y marcada apenas hizo presión al entrar . Ella sintió tanto placer que mordió mi cuello. Dejo clavado sus dientes en mi cuello y no me soltaba, me estaba doliendo y dando placer a la vez, asi que le dí dos o tres embestidas feroces contra la pared, sin ningún tipo de piedad. Hasta que a la quinta embestida me soltó, jadeandome al oido:

- Me corro....me corro.... ahhhhhhhhhh...me corro......



Apenas tuve tiempo para reaccionar, así que introduje mi polla un par de veces mas, para prolongar su orgasmo y comenzar con el mio. Su cintura cada vez se movía mas lentamente, y yo saqué mi polla porque estaba apunto de reventar dentro de ella. Cuando saqué mi polla para correrme fuera, pude ver como estaba llena de su corrida. Comencé a correrme entre sus piernas mientras ella recuperaba la respiración. Mi semen le resbalaba por las piernas, y ella continuo besandome.


Luego nos incorporamos, miramos a nuestro alrededor y la gente todavía seguía bailando, aunque pude ver como algunos de los que habia en aquella discoteca se había percatado de lo ocurrido. Ella me dijó que tenia que ir al baño a limpiarse, momento en el que aproveché para ir a ver como andaba mi novia, pero resulta que ya no estaba allí... ¿le habría ido la noche mucho mejor que a mi?... casi seguro :P